Esta tradicional Hacienda, no solo juega un papel importante en las actividades agropecuarias del municipio de Paramo, también, hace parte de la tradición oral, la historia y la cultura de los habitantes del municipio.
La historia cuenta que, su más antiguo propietario el señor Pedro Belarmino Plata, para algunos juzgado como villano y para otros como bondadoso, había vendido su alma al diablo a cambio de fortuna y poder, y al mismo tiempo, osado y valeroso, burlo tal pacto y escapo del trato pactado inicialmente. Algunos comentan que este ser malévolo aún merodea los alrededores de la Hacienda y sigue preguntando con nombre a algunos residentes de la misma.
Este lugar caracterizado por sus grandes extensiones de cultivos de café y caña trascendió de generación en generación en la familia Plata. Fue precisamente el hijo de Don Belarmino, el señor Pedro Plata quien puso fin a estas historias y empezó un nuevo camino de oportunidades para la comunidad.
Don Belarmino, también para algunos tachado como bondadoso y misericordioso por construir viviendas para todos sus trabajadores a los alrededores de la Hacienda y preocuparse por la salud de los jornaleros y la de sus hijos, y para otros, tildado de malévolo y soberbio por golpear a sus trabajadores y darles malos alimentos, elaboró su propia moneda, moneda de cobre que por un lado tenia escrito su nombre y por el otro la imagen de la Hacienda.
Muchas historias aun se tejen alrededor de este atractivo turístico que pertenece al municipio de Paramo y siguen siendo contadas por los miembros de la comunidad a sus visitantes.
0 comentarios:
Publicar un comentario